Luciano González, escultor valenciano, residente en La Canyada: ‘el arte debería humanizarse’. Luciano González es un escultor valenciano de gran renombre nacido en España y residente en La Cañada, Paterna. A lo largo de su carrera, se ha destacado por su habilidad para transformar materiales nobles como la madera, la piedra y el metal en piezas de arte que capturan la esencia de la figura humana y el mundo natural.
Su estilo se caracteriza por la abstracción figurativa, fusionando la técnica tradicional con enfoques contemporáneos. Hemos tenido el gran placer de poder hablar con él, visitar sus espectaculares obras y descubrir quién es realmente.
– Buenos días Luciano, encantada de poder hablar contigo. Estamos rodeados de muchas obras tuyas y me gustaría que nos contaras un poco que buscas realizando estas obras
– Buenos días. Y muchas gracias por dedicarme este ratito donde estoy seguro de que vas a descubrir algo, sobre todo aquí en La Canyada, que muchos desconocen. Mis esculturas no solo buscan representar formas, sino transmitir emociones y experiencias, explorando la relación entre el espacio, el volumen y el vacío. La fluidez de sus formas invita a la reflexión, mientras que la interacción de la luz y la sombra en sus piezas genera un dinamismo que transforma el espacio donde se encuentran.
– Qué interesante… y ¿dónde podemos encontrar estas obras?
– A lo largo de los años, la gran mayoría de mis obras han estado expuestas en numerosas galerías y espacios públicos de Valencia.
Actualmente se puede visitar en l’Eliana gran parte de mi obra que estará hasta el dos de enero y también en Valencia ciudad, justo en el edificio del reloj, he participado en una exposición solidaria donde cualquiera puede ir a visitarla de manera totalmente gratuita. También tengo una exposición permanente en un conocido hotel de Alicante.
– Durante todos estos años te has consolidado como una figura destacada dentro de la escultura contempóranea de la región…
– Si, así es. Me gusta mi trabajo y conseguido combinar la tradición con la innovación y ademas estoy muy sensibilizado hacia la materia y la forma. Hace poco me encargaron una escultura para el municipio de Calpe y de Denia, y allí están. Todas mis obras puedes encontrarlas tanto en espacios urbanos como en los naturales donde el público puede interactura de manera directa con ellas.
– ¿Cuál es tu público principal?
Los europeos y americanos tienen una mayor apreciación por la escultura pero en nuestro país, de declinan por la pintura. Hace tiempo creé una escultura de una motocicleta para un coleccionaista suizo y ésta fue inspirada en el modelo Bultaco de los años 30.
– Pero para poder esculpir, se necesita tener mucho espacio…
– Si, es cierto, las limitaciones de espacio en los hogares afectan la exhibición de esculturas y por eso yo tengo la suerte de tener mucho espacio en mi casa que es realmente donde me inspiro y disfruto del proceso creativo, creando así mi propio estilo.
– ¿Cuántos reconocimientos has recibido?
– Bueno, eso no es fácil contarlo. Reconocimientos muchos y premios otros tantos. Fui premiado por el ayuntamiento de Valencia y también recibí un galardón de los premios de Bellas Artes Joan Moldud en 2015. También he participado en varios eventos culturales e institucionales de Valencia, lo que supone para mi un gran reconomiento también.
– ¿Estas obras son asequibles?
– Bueno, hay de todo. También es verdad que el rango de los precios varía dependiendo de muchos aspectos, las hay desde 500 euros hasta 7.000, todo depende del formato y la complejidad.
– ¿Y tienes antecedentes que hayan ilustrado y animado con tu carrera?
– Claro, comencé mi carrera con mi hermano, que también es escultor y tiene una herencia familiar en la artesanía. He colaborado con marchantes de arte para presentar mi trabajo y por lo tanto he ganado exposicion en la comunidad artística.
¿ En que te defiendes más?
– Tengo grandes habilidades para la escultura, como la soldadura y la aplicación de pátina, ya que son cruciales para crear arte. Considero que la experiencia práctica en talleres es tan valiosa como la educación formal en arte.
– ¿Y realmente puedes vivir de esto sólo?
– Si, claro, lo he hecho toda mi vida. Pero le dedico mucho tiempo y sólo un pequeño porcentaje de escultores puede sostenerse económicamente solo con su arte debido a losaltos costos de los materiales y desafíos de la producción. Por lo tanto, considero que es esencial aprender continuamente y adaptarse en el campo para superar estos desafíos. Es decir, que todo el proceso lo hago yo mismo, si no encargo trabajos a externos, ahorro costes.
-¿En qué estas trabajando ahora?
– Actualmente estoy trabajando en un proyecto que involucra modelos de arcilla que pueden pasar a aluminio. Mi intención es incorporar simbolismo significativo en todas mis obras con mi gran objetivo que es: que cada pieza cuente una historia o transmita una emoción.
Me gustaría señalar que realicé una placa en memoria de Javier Botella. Este doctor, era valenciano, intensivista, de 67 años, falleció el 3 de agosto en el descenso del Khan Tengri, de 7010 m de altitud, en Kazajistán.
En resumen, Luciano González es un escultor cuya obra refleja la evolución constante de la escultura en el siglo XXI, manteniendo un diálogo abierto entre el arte y la naturaleza, y siempre invitando al espectador a descubrir nuevas interpretaciones a través de sus formas y materiales.
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